Idea-Tec, la startup que desarrolla pintura con plumavit, suma esmalte sintético a su portafolio

Idea-Tec, startup que fabrica pinturas sustentables en base a residuos de plumavit o poliestireno expandido (EPS), lanzó este año un esmalte sintético para superficies metálicas, fierros y maderas llamado Croma, producto que se suma a la pintura para suelos -su primera creación, bautizada como Groen- y la pintura para muros interiores y exteriores.

El emprendimiento, creado en 2014 por las químicas Cristina Acuña y Constanza Cifuentes, a la fecha ha evitado que 56 toneladas de plumavit terminen como residuos en vertederos y reducido la huella de carbono en 204.000 kilos de dióxido de carbono (CO2), lo que equivale al CO2 absorbido por más de 13.300 árboles de Quillay adultos por un año. 

Acuña explicó que junto a Cifuentes se dieron cuenta de que el plumavit era un problema transversal en el mundo debido a que “no se reciclaba porque es muy liviano, ya que tiene mucho aire y es muy caro transportarlo”. 

Luego de varias investigaciones, lograron crear un proceso y una máquina para sintetizar el plumavit, lo que les permitió transformar este elemento en un líquido pegajoso. Sin embargo, crear la pintura no fue tarea fácil, -dicen- ya que antes pasaron por otras ideas, como elaborar pegamento o barniz.  

Para lograr la pintura, Acuña explica que luego de sintetizar el EPS, obtienen un líquido al que añaden una serie de aditivos y componentes, como talco, proceso que realizan en la planta que tienen en la comuna de Colina.

Actualmente, el plumavit lo obtienen a través de tres fuentes principales: proveedores con los que tienen alianzas -que incluyen empresas y gestores domiciliarios-, el punto limpio de la comuna de Renca, y el evento Mercado Reciclaje organizado por la Municipalidad de Vitacura. 

Huella de carbono y patentamiento 

Acuña destacó que las pinturas permiten contribuir a las metas de huella de carbono de las empresas que compran sus productos, ya que “evitan las emisiones que produce la contaminación del plumavit y recurrir a soluciones más complejas como plantar árboles o comprar bonos de carbono para mitigarlo”. 

La innovación ya obtuvo la patente en Chile hace un par de años y hoy están finalizando su etapa de patentamiento a nivel internacional para certificar el proceso creado por las emprendedoras. 

Una vez que finalicen con esta etapa, buscarán comenzar su expansión a Europa.